Xoloitzcuintle: un perro que ladra y sí muerde

XOLOITZCUINTLE: UN PERRO QUE LADRA Y SI MUERDE
Psic. José M. Sánchez Durón
 
¿Qué mensajes se les transmite a un equipo para conseguir su máximo potencial?, ¿qué se le dice a un futbolista para que aprenda a confiar en si mismo y en el equipo?, ¿cómo se le habla a un grupo para convencerlos de que van por el camino correcto?

Las respuestas a estas y otras preguntas son la búsqueda permanente de todo Director Técnico (D.T.)  en el fútbol profesional. El D.T. es un individuo que sin duda amerita conocer mucho de fútbol pero -sobretodo- debe de convertirse en un experto en al arte de la comunicación humana. Debe de saber cómo transmitir un mensaje mientras demuestra que está convencido de lo que dice, al grado de lograr incluso convencer a quien lo escucha: el jugador mismo.

Por supuesto lo anterior no es una tarea fácil. Todo equipo de fútbol es un conjunto de personalidades diferentes que tienen sus propios intereses, motivaciones, gustos y disgustos, y lograr conjuntarlos a todos para tomar un acuerdo en común es una labor que exige tacto, paciencia, audacia y algo de simpatía.
Sin lugar a dudas, todas estas cualidades distinguen a Daniel “travieso” Guzmán y su cuerpo técnico. Este grupo de audaces han asumido el reto de dirigir a un Club que ya sabe lo que es llegar a la cima y alzar un trofeo de campeón en diferentes divisiones (incluyendo por supuesto la primera división nacional), y han logrado en poco tiempo conjugar los intereses de todos para “echarse el equipo al hombro” en cada partido. Como ya lo dije antes, lograrlo no es cosa fácil. Pero parece que este cuerpo técnico sabe las dosis para transmitir cada mensaje… y de hacerlo en los momentos adecuados.
En el presente torneo los Xolos han mostrado una y otra vez la “entereza psicológica” de los grandes. Por “entereza psicológica” me refiero a un conjunto de cualidades relacionadas con la lucha, la competitividad, el esfuerzo, la disciplina y la insistencia. Los Xolos no solo están sumando puntos sino que están logrando desarrollar en sus seguidores el impacto psicológico más importante para un equipo: QUE SU AFICIÓN CREA EN ELLOS Y SE ILUSIONE CON EL CAMPEONATO.

Apenas este fin de semana los Xolos superaron claramente a los Tiburones Rojos de Veracruz, un equipo que a pesar de su situación en la porcentual está ubicado en la parte alta de la tabla. La semana pasada, los Xolos demostraron que cada minuto cuenta, cuando lograron empatar al minuto 92 al Santos de Torreón. Y hace dos semanas dieron una cátedra de lucha y coraje cuando revirtieron un marcador de dos a cero en contra para salir airosos venciendo a los Tuzos del Pachuca con un marcador final de  3 a 2.

¿Casualidad?, ¿suerte?, ¿buena racha? Cualquiera que atribuya estos resultados a esta clase de “explicaciones” no conoce de futbol ni conoce la capacidad del “travieso” y su gente. La “casualidad” solo explica los buenos resultados cuando son aislados pero cuando estos resultados son constantes entonces será mejor hablar de la capacidad del líder y la de sus dirigidos. En este caso, el líder es un hombre que ya ha sido campeón en el fútbol mexicano y que ha salvado del descenso a más de un Club. Y sus dirigidos son un grupo de xoloitzcuintles que le tienen amor a su raza y respeto a su sangre y sus colores.

Vaya un fuerte abrazo para ustedes Daniel, Mao, Octavio y Alan. Aplaudo su trabajo técnico, táctico y físico… pero sobretodo el psicológico.

0 comentarios:

Publicar un comentario